El esfuerzo excesivo y la tensión habitual son agotadores y pueden provocar agotamiento, dejándonos cansados ​​e insensibles. Los períodos prolongados de estrés pueden traer algunos síntomas, como: dolores de cabeza, dolores corporales y tensión muscular, insomnio, bruxismo, conductas nerviosas como morderse las uñas y además, agitarse, frustrarse y alterarse fácilmente, tener dificultad para relajarse, olvidos y desorganización, mala concentración, por nombrar algunos.

El estrés es una respuesta natural y universal a situaciones difíciles. Es la forma en que respondes al estrés lo que marca la diferencia entre sentirte bien y enloquecer.

En el taller Movimientos Diarios para Prevenir el Estrés, secuencias de movimientos suaves guiados ayudarán a los participantes a calmar el sistema nervioso, relajar la mente y dirigir la atención a áreas que están en un «patrón de espera» con exceso de tensión muscular.

Estos serán los primeros pasos hacia el reequilibrio del sistema. Aprender a alcanzar este estado en las actividades diarias se convierte en una clave que permitirá a los participantes acceder a un estado interno más saludable y tranquilo.

Más informaciones: safia@poaciadanca.com.br